Reflexión diaria
Tenemos el cáliz de tu Preciosa Sangre.
Oh Señor, no podemos ir a la piscina de Siloé a la que enviaste al ciego. Pero tenemos el cáliz de tu Preciosa Sangre, llena de vida y luz. Cuanto más puros somos, más recibimos.
San Efrén
Reflexión diaria
Cuando Jesús se digne venir a mí en la santa comunión.
Que la Bienaventurada Virgen María, purifique mi cuerpo para que sea el tabernáculo de Jesús, menos indigno de poseerlo cuando se digne venir a mí en la santa comunión.
San Pio de Pietrelcina
Reflexión diaria
Lo que llamo Cuerpo mío, lo es en verdad.
…Lo que ahora os he dado no lo juzguéis pan, tomad, comed y no piséis sus migajas; lo que llamo Cuerpo mío, lo es en verdad. Una mínima miga suya puede santificar millones y basta para dar vida a todos los que la comen. Tomad, comed con fe, sin dudar un punto que esto es mi Cuerpo y el que lo come con fe, come en él fuego y Espíritu Mt 3,11;… quien con fe come el pan santificado en mi nombre, si es puro, puro se conserva, si es pecador, es perdonado…
San Efrén, Doctor de la Iglesia
Sermón 4 Nº 4
Reflexión diaria
Su Sangre fluye místicamente del altar para purificarnos.
El cordero de Dios es inmolado en beneficio nuestro; su Sangre fluye místicamente del altar para purificarnos: brota la Sangre del costado herido del Salvador y recógese en el cáliz.
San Juan Crisóstomo
Doctor de la Iglesia
Reflexión diaria
Hijo mío te ofrezco todas las amarguras de mi Pasión.
“Hijo mío, mira, te ofrezco todas las amarguras de mi Pasión, para que las hagas tuyas y me las ofrezcas en retorno.” Por consiguiente, si tú dices: “Oh Jesús, os ofrezco vuestra dolorosa Pasión”, Él te responderá: “Hijo mío, yo doblo su valor”. Y si prosigues: “Oh Jesús, os ofrezco vuestra Sangre”, Él te responderá: “En cambio yo, hijo mío, te lavo con ella dos veces.”
Santa Matilde
Reflexión diaria
Jesús se ofreció a sí mismo como sacrificio y hostia.
La voluntad de su Padre fue que su bendito y glorioso Hijo, a quien nos dio para nosotros y que nació por nuestro bien, se ofreciese a sí mismo como sacrificio y hostia, por medio de su propia sangre, en el altar de la cruz; no para sí mismo, por quien todo fue hecho, sino por nuestros pecados, dejándonos ejemplo para que sigamos sus huellas. Y quiere que todos seamos salvos por Él y que lo recibamos con un corazón puro y con nuestro cuerpo casto. Pero son pocos los que quieren recibirlo y ser salvos por Él, aunque su yugo es suave y su carga ligera 2CtaF 6-15.
San Francisco de Asís
Carta a toda la Orden
Reflexión diaria
La castidad no es posible sin la Eucaristía.
La devoción al Santísimo Sacramento y la devoción a la Santísima Virgen, no son simplemente el mejor camino, sino que de hecho son el único camino para conservar la pureza. A la edad de veinte, nada sino la comunión puede conservar puro el corazón de uno… La castidad no es posible sin la Eucaristía.
San Felipe Neri
Reflexión diaria
¡Qué pureza de corazón traeríamos ante Él!
Oh, si pudiéramos comprender quién es ese Dios a quien recibimos en la Sagrada Comunión, entonces sí, qué pureza de corazón traeríamos ante Él.
Santa María Magdalena de Pazzi
Reflexión diaria
La castidad no es posible sin la Eucaristía.
La devoción al Santísimo Sacramento y la devoción a la Santísima Virgen, no son simplemente el mejor camino, sino que de hecho son el único camino para conservar la pureza. A la edad de veinte, nada sino la comunión puede conservar puro el corazón de uno… La castidad no es posible sin la Eucaristía.
San Felipe Neri
Reflexión diaria
Cuanto más puros y castos, más hambre de Eucaristía tendremos.
Cuanto más pura y más casta sea un alma, tanta más hambre tiene de este Pan, del cual saca la fuerza para resistir a toda seducción impura, para unirse más íntimamente a su Divino Esposo: “Quien come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él”. (Jn. 6, 57)
SS León XIII