Reflexión diaria
El Cuerpo Místico de Jesús.
Existen dos cuerpos de Cristo sobre el altar; está el Cuerpo real (el Cuerpo nacido de María Stma. Virgen, resucitado y que ascendió al cielo) y está su Cuerpo Místico que es la Iglesia (nosotros).
Jesús a la Beata Concepción Cabrera de Armida
Cruz de Jesús II
Reflexión diaria
El Cuerpo Místico de Jesús.
Existen dos cuerpos de Cristo sobre el altar; está el Cuerpo real (el Cuerpo nacido de María Stma. Virgen, resucitado y que ascendió al cielo) y está su Cuerpo Místico que es la Iglesia (nosotros).
Jesús a la Beata Concepción Cabrera de Armida
Cruz de Jesús II
Reflexión diaria
El ofertorio.
“La ofrenda del Cuerpo de Cristo debe ser acompañada de la ofrenda del propio cuerpo”.
Jesús a la Beata Concepción Cabrera de Armida
Cruz de Jesús II
Reflexión diaria
“Yo no pretendo con este sacramento sólo una asimilación.”
“Hija Mía, ¿para qué dije tomad y comed esto es mi Cuerpo, tomad y bebed, esta es mi Sangre, sino para transformar a la criatura en mí? ¿Qué es lo que pretendo con el Sacramento sino la unificación, divinizar al hombre, no sólo con mi contacto, sino aún con mi substancia divina, que lo haga una cosa conmigo? Yo no pretendo con este sacramento sólo una asimilación sino una como transustanciación en mí, una transformación por medio de la compenetración, de la unión, de la unidad que es más, absorbiendo la potencia divina a la pobre criatura endiosándola”.
Jesús a la Beata Concepción Cabrera de Armida
Cruz de Jesús II
Reflexión diaria
El Cuerpo Místico de Jesús.
“Al ofrecer yo mi Cuerpo y mi Sangre, ofrecía con él y ofrezco, no sólo el Cuerpo material sino mi Cuerpo Místico representado en mi Iglesia y en las almas, y con él a mi Alma y mi Divinidad, es decir, al Verbo en esta Divinidad, por el cual tienen valor los actos de mi humanidad, y tendrán los tuyos y los de tus hijos”.
Jesús a la Beata Concepción Cabrera de Armida
Cruz de Jesús II
Reflexión diaria
No encontré manera más propia.
¿Por qué llama la atención y hasta se duda de la Eucaristía, si es sólo un rasgo de mi amor íntimo y de su unidad? Todo un Dios no encontró manera más propia para manifestar su sed de acercamiento al hombre que bajar al mundo y quedarse en la Eucaristía sin dejar de ser divino.
Beata Concepción Cabrera de Armida
A Mis Sacerdotes; LXVII
Reflexión diaria
Quise perpetuar ese milagro hasta el fin de los siglos.
No le bastó a mi amor infinito unos cuantos años de portentoso milagro -el de esconder y ocultar mis resplandores en la tierra-, sino que quise perpetuar ese milagro hasta el fin de los siglos en la Eucaristía. También ahí velo mis resplandores para que el hombre no tema, sino que sólo le ame con la confianza de esa igualdad que da el amor.
Beata Concepción Cabrera de Armida
A Mis Sacerdotes; LXVII