Reflexión diaria
María está presente en todas nuestras celebraciones eucarísticas.
María está presente con la Iglesia, y como Madre de la Iglesia, en todas nuestras celebraciones eucarísticas. Así como Iglesia y Eucaristía son un binomio inseparable, lo mismo se puede decir del binomio María y Eucaristía. Por eso, el recuerdo de María en la celebración eucarística es unánime, ya desde la antigüedad, en las Iglesias de Oriente y Occidente.
Beato Juan Pablo II
Carta Encíclica Ecclesia de Eucharistia, n. 57
Reflexión diaria
Sobre la mesa del Señor está el misterio que sois vosotros mismos.
Si vosotros sois el cuerpo y los miembros de Cristo, sobre la mesa del Señor está el misterio que sois vosotros mismos y recibís el misterio que sois vosotros. A lo que sois respondéis con el Amén, y con vuestra respuesta lo rubricáis. Se te dice: “El Cuerpo de Cristo”, y respondes: “Amén”. Sé miembro del cuerpo de Cristo para que sea auténtico el Amén.
San Agustín, Doctor de la Iglesia
Sermón 272
Reflexión diaria
María está presente en todas nuestras celebraciones eucarísticas.
María está presente con la Iglesia, y como Madre de la Iglesia, en todas nuestras celebraciones eucarísticas. Así como Iglesia y Eucaristía son un binomio inseparable, lo mismo se puede decir del binomio María y Eucaristía. Por eso, el recuerdo de María en la celebración eucarística es unánime, ya desde la antigüedad, en las Iglesias de Oriente y Occidente.
Beato Juan Pablo II
Carta Encíclica Ecclesia de Eucharistia, n. 57
Reflexión diaria
Te prepara para fundirte con Dios.
La Eucaristía es medio y fin. Te prepara para fundirte con Dios, y a la vez, te funde con Dios. Te prepara para purificarte, para adelgazarte, para hacerte más libre, más capaz, y viene a llenarte esas capacidades.
Sierva de Dios Teresa Mª de Jesús Ortega, op
Eucaristía, banquete de amores y sacramento de unidad
Reflexión diaria
Si una mujer embarazada asiste a la Santa Misa.
Si una mujer embarazada asiste a la Santa Misa, siempre y cuando ello le sea posible, tomándose un poquito de molestia, como mayor se la tomó la Virgen al viajar a Belén para dar a luz allí al Redentor, podrá obtener grandes auxilios en los dolores de su parto.
San Beda el Venerable,
Doctor de la Iglesia
Reflexión diaria
La Santa Misa y las almas del Purgatorio
Cuando se celebra la Santa Misa por un alma del Purgatorio, aquel fuego tan abrasador suspende su acción, y el alma cesa de sufrir todo el tiempo que dura la celebración del Santo Sacrificio.
San Jerónimo
Reflexión diaria
La Santa Misa es el cielo en la tierra.
Decía el Cardenal Schönborn que el cielo y la tierra, la Iglesia celeste y la Iglesia peregrina, se unen sobre la tierra durante la celebración de la Santa Misa. Por eso, decimos claramente que la Santa Misa es el cielo en la tierra y que se celebra realmente con todos los ángeles y todos los santos.
Lorient Marc, De L´angelité, o.c., p. 25.
Reflexión diaria
La primera piedra del sacrificio fue María Santísima.
La primera piedra del sacrificio fue María Santísima. Ara bendita y misteriosa donde se celebró la primera Santa Misa. Allí donde está el Hijo hay Misa, hay sacrificio, hay alabanza. Sé el Hijo. Tu vida será una Santa Misa.
Sierva de Dios Teresa Mª de Jesús Ortega, op
Sedienta de Eucaristía
Reflexión diaria
Todo el Paraíso participa en cada Santa Misa.
Padre Tarsicio de Cervinara: ¿Asiste la Santísima Virgen a su misa?
San Pío de Pietrelcina: ¿Y crees que la Madre no se interesa en su Hijo?
– ¿Asisten los ángeles? – En multitudes. – ¿Qué hacen? – Adoran y aman.
– Padre, ¿quién está más cerca de vuestro altar? – Todo el paraíso.
Reflexión diaria
Cuando nos presentamos como víctimas.
El sacrificio del altar será a nuestro favor verdaderamente aceptable como nuestro sacrificio a Dios, cuando nos presentamos como víctimas.
San Gregorio Magno,
Papa, Padre y Doctor de la Iglesia
Reflexión diaria
A la voz del sacerdote se abren los cielos.
A la voz del sacerdote se abren los cielos y los coros de los ángeles asisten a la misa. Lo más bajo se une a lo más alto, lo terrestre a lo celeste, las cosas visibles a las invisibles. Por eso, al sacerdote le hacen falta dos alas: la santidad y la ciencia para poder subir hasta Dios y después descender para atender a las almas y así cumplir su sublime vocación de ser luz del mundo y sal de la tierra.
San Gregorio VII, Papa
Diálogos IV, 58; PL 77. 425 D
Reflexión diaria
Por la Eucaristía somos una humanidad añadida a la de Cristo.
Gracias a la Eucaristía nosotros nos volvemos una humanidad añadida a la de Cristo.
P. Raniero Cantalamessa, OFMCap
Predicador Pontificio
Reflexión diaria
El que habla en la Santa Misa es Cristo mismo.
El que habla en la Santa Misa, no es el sacerdote humano, al que escuchamos. Ciertamente, oímos su voz, pero su voz viene de más arriba, de más hondo. Es la voz de Cristo, que habla a través del sacerdote. Sus manos son las manos de Jesús, porque, en realidad, es Jesús quien celebra la Santa Misa por medio del sacerdote. Él es el único y eterno sacerdote; pero, como a Él no lo vemos ni oímos, necesita del sacerdote, como de una pantalla, para proyectar su propia vida, su amor, su voz y su ofrecimiento permanente por la salvación del mundo.
P. Ángel Peña O.A.R.
Sacerdote para siempre
Reflexión diaria
Si las almas del purgatorio pudieran volver a este mundo.
¡Ah! Si las almas del purgatorio pudieran volver a este mundo, ¡qué no harían por asistir a una sola Misa! Si pudierais vosotros mismos comprender su excelencia, sus ventajas y sus frutos, ni un solo día querríais pasar sin participar en ella.
San Pedro Julián Eymard
Reflexión diaria
Bésame con el beso de tu boca.
Bésame con el beso de tu boca. (Cant 1,2)
¡Oh, Verbo Eterno, nunca me pareces más grande que cuando te disfrazas de pan para besar más fácilmente mi alma!
La Santa Misa, sí, la Santa Misa es el beso del Eterno a la pobre y frágil criaturilla suya.
Sierva de Dios Teresa Mª de Jesús Ortega, op
Eucaristía, banquete de amores y sacramento de unidad