Reflexión diaria
Prenda del paraíso que quiere darnos.
Más lejos va todavía San Bernardo al llamar a este sacramento “amor de los amores”, pues este don encierra todos los restantes dones que el Señor nos hizo, la creación, la redención, la predestinación a la gloria, porque, como canta la Iglesia, la Eucaristía no sólo es prenda del amor que Jesucristo nos tiene, sino también prenda del paraíso que quiere darnos. Por eso San Felipe Neri no acertaba a llamar a Jesucristo en el Santísimo Sacramento sino con el nombre de amor, y al cabo de su vida, cuando le llevaron el Viático, exclamó: “He aquí el amor mío, dame a mi amor”.
San Alfonso María de Ligorio
Práctica del amor a Jesucristo
Reflexión diaria
¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
Se gana más oyendo una sola Santa Misa con devoción que distribuyendo todos los bienes a los pobres y marchando en peregrinación a todos los santuarios más venerados del mundo. ¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
San Bernardo de Claraval
Reflexión diaria
La Santa Misa y las Benditas Almas del Purgatorio.
Se cuenta en la vida de san Bernardo que estaba un día celebrando misa en Roma, en una iglesia cerca de Tre Fontane, llamada Scala coeli, escalera del cielo. Oraba por los difuntos y, después de la consagración, vio a un ángel descender al purgatorio y llevar un alma al cielo. San Bernardo siguió rezando por estas almas del purgatorio y empezó a subir otra y otra, y se formó como una escalera de almas que subían al cielo. Fue tal la impresión de san Bernardo que les contó esta visión a sus acompañantes y de ahí se empezó a llamar a aquella iglesia scala coeli.
Reflexión diaria
¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
Se gana más oyendo una sola Santa Misa con devoción que distribuyendo todos los bienes a los pobres y marchando en peregrinación a todos los santuarios más venerados del mundo. ¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
San Bernardo de Claraval
Reflexión diaria
¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
Se gana más oyendo una sola Santa Misa con devoción que distribuyendo todos los bienes a los pobres y marchando en peregrinación a todos los santuarios más venerados del mundo. ¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
San Bernardo de Claraval
Reflexión diaria
¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
Se gana más oyendo una sola Santa Misa con devoción que distribuyendo todos los bienes a los pobres y marchando en peregrinación a todos los santuarios más venerados del mundo. ¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
San Bernardo de Claraval
Doctor de la Iglesia
Reflexión diaria
Los Ángeles nos rodean como una Guardia de Amor.
La Eucaristía es ese amor que sobrepasa todos los amores en el Cielo y en la tierra.
Cuando Jesús está corporalmente presente en nosotros, los Ángeles nos rodean como una Guardia de Amor.
San Bernardo de Claraval
Doctor de la Iglesia
Reflexión diaria
¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
Se gana más oyendo una sola Santa Misa con devoción que distribuyendo todos los bienes a los pobres y marchando en peregrinación a todos los santuarios más venerados del mundo. ¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
San Bernardo de Claraval
Doctor de la Iglesia
Reflexión diaria
¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
Se gana más oyendo una sola Santa Misa con devoción que distribuyendo todos los bienes a los pobres y marchando en peregrinación a todos los santuarios más venerados del mundo. ¡Oh riquezas inmensas de la Santa Misa!
San Bernardo de Claraval